«Me sorprende lo felizota que eres, Bolita.»
Me cautivas con tu sonrisa espontánea cuando menos lo espero, con tu risa acompañada de sorpresa cuando encuentras a tus muñecas que «juegan contigo al escondite», hasta con tu risa ruidosa cuando voy a por ti como respuesta a tus provocaciones traviesas. Una y mil veces gracias por ser tan feliz, no hay mejor «pago» para una madre.
Imagino que todos los padres pensarán eso de sus bebés pues son felices con lo más inesperado. Simplemente con hacerles una carantoña parece que les has arreglado la semana… aunque la verdad es que cuando te devuelven esa sonrisa que conquista a cualquiera los que de verdad te hacen feliz son ellos a ti.
Que conste que el término felizota no lo he acuñado yo, es como mis tíos describen a Emma porque siempre se ríe y es muy expresiva.
Igual no tiene nada que ver, pero yo creo que su felicidad está muy relacionada con la crianza respetuosa que intentamos aplicar. Me gusta pensar que es así, aunque tengo claro que también influirá su carácter alegre y su propia personalidad.
Este post forma parte de la serie Lo que me sorprende de mi hija. Pincha el enlace para conocer más sobre ella.
2 Comentarios
Con que poco se conforman para ser felices. Con un simple gesto se les saca una carcajada…. Y los papis más felices que unas perdices!!!!
Ya te digo… y los papás también 🙂