El pasado 11 de octubre fuimos a visitar Gata de Gorgos y la decimosegunda edición de su feria «Gata al Carrer« (Gata en la calle). Fue un blogtrip (una reunión de blogueras) al que acudimos con nuestras respectivas familias y pasamos un día todos juntos.
Todo empezó cuando otras compañeras blogueras y yo recibimos una invitación de la Associació de comerç de Gata. Como estos eventos me encantan lo primero que hice fue ver lo lejos que nos pillaba, por si sería muy pesado para Bolita, que no le gustan demasiado los viajes largos, y para mí, por mi embarazo de 35 semanas. Me sorprendió descubrir que está a una hora y poco de Valencia… y como eso no es nada, acepté encantada mi invitación y esperamos ansiosos la llegada del domingo para ver qué nos ofrecía este municipio.
Nada más llegar a Gata acudimos a la plaza donde habíamos quedado con el resto de blogueras y sus familias. Fue un placer conocer a Susana y por supuesto volver a ver a Elena y Sandra, Mª José, Elisa, Alicia y a Mª José y Vanessa que fueron las encargadas del maravilloso evento (¡¡Mil gracias a las dos por pensar en mí!!). Una pena que Lourdes y Ana no pudieran asistir a última hora. ¡¡Se os echó mucho de menos chicas!!.
Una vez todos juntos comenzamos a pasear por las calles de Gata para ir admirando sus comercios y los puestos de su feria. Encontramos desde artesanía a vehículos pasando por deliciosas pastelerías en las que se te hacía la boca agua sólo con echar un vistazo.
El primer sitio que visitamos fue la parada de Avival (Asociación de criadores de razas de gallinas y palomas autóctonas valencianas). Los peques lo pasaron en grande viendo gallos, gallinas y palomas de multitud de razas distintas además de otros animales como pavos y conejos.
A continuación, la pastelería Dulcipan nos obsequió con un almuerzo para coger fuerzas para el resto de la jornada. ¡No me digáis que no tiene todo una pintaza increíble!
Después de pasear por las calles de Gata de Gorgos (que conservan el encanto de pueblo que a mí tanto me gusta) la siguiente parada técnica en los castillos hinchables sirvió para que nuestros peques pudieran disfrutar un rato libremente… y para que los papás y mamás pudimos hablar un ratito de nuestras cosas.
De camino a esa zona pasamos por la plaza de la iglesia en la que había una parada donde un gran grupo de mujeres bordaba y hacía bolillos. Mientras mi peque disfrutaba pegando saltos me acerqué y estuve mirando embobada un rato la soltura de esas manos moviendo los bolillos, agujas y alfileres. ¡¡Menuda destreza y qué arte!!.
Luego nos dirigimos al stand que Xiulet, un centro lúdico, donde a los peques les pintaron las caritas y les ayudaron a hacer un detallito que luego se llevaron a casa.
Después comimos en el puesto de la pastelería La Pau. Buenísimo el pollo al curry con arroz que tomé en estupenda compañía y a la fresca (en la calle, repartidos en cuatro mesas todos disfrutamos de la comida y la charraeta que la acompañó). Otra vez me vino a la mente el toque de pueblo donde los niños pudieron jugar sin que los adultos estuviéramos tan preocupados como habitualmente, ¡¡para algo cortan las calles al tráfico!!.
Después de la comida los peques disfrutaron de un taller de coctelería a cargo de Exclusive & Drinks donde les explicaron que «para pasarlo bien sólo hace falta hielo y fruta». ¡Y vaya si lo pasaron bien! Estuvieron súper atentos, hasta los más pequeños, sin perder detalle a las explicaciones y queriendo probarlo todo.
A media tarde no podía faltar otro refrigerio, así que todos juntos fuimos a probar el «aigua-llimó» (granizado) y los helados artesanales de la heladería Ca El tramusser que son, sencillamente espectaculares.
Como colofón a tan divertido día los más peques (más alguna mami y maridín) dieron un paseo en carro de caballos. Esta actividad fue la que más le gustó a mi peque. Maridín le iba explicando que su abuelo paterno tenía un carro similar y le llevaba a pasear cuando era pequeño e iban saludando a todo el mundo «cual fallera mayor»… pero sobre todo ¡¡porque vio como el caballo hacía caca!!. No veáis lo emocionada que estaba cuando me lo contaba luego :).
Por si no teníamos suficiente con todo lo vivido hasta entonces, Vanessa nos trajo un detalle a cada una de las blogueras de parte de la Associació de comerç de Gata. ¡¡Muchísimas gracias por el detalle y por supuesto por la invitación!!
Un bolso chulísimo de Casa Barrera, mistela del Celler de la Marina, embutido artesano de Silvestra (deseando estoy de dar a luz y catarlo porque tiene un aroma que cada vez que lo olfateo me entran ganas de darle un bocado), coca amb panses del Forn de pa Xaro y las chuches para Emma (que no aparecen porque volaron en un segundo) de Ca Doloretes… ¿Es o no es para quedarse alucinada?
La verdad es que pasamos un día genial y se nos hizo muy corto, pero intuyo que nos queda mucha Gata de Gorgos por descubrir y sin duda volveremos a visitarla. Empezando por el entorno natural en el que está situada que es impresionante. De hecho a última hora descubrimos una tirolina genial que recorre un barranco y que pasa por debajo de un puente. Me quedé con unas ganas locas de probarla si no hubiera sido por el embarazo.
Yo repetiré en otra ocasión con más tranquilidad (y sin bombo!!!). Y tú, ¿te animas a visitar Gata?.
10 Comentarios
Fue genial, un día estupendo y tú aún más estupenda.
Gracias por venir a Gata y nos vemos en el próximo cuando te recuperes de tu parto.
Un besazo
Gracias de nuevo por preocuparte en organizar cosas como esta.
Y sí, estoy deseando veros de nuevo, aunque sea para tomar un cafetito en plan tranqui.
Un beso!!
Graciasss!!! por venir, con 35 semanas no es fácil, aunque tú las llevas estupendamente bien!!! No te preocupes por el embutido, cuando des a luz, te mando más… está riquísimo!!! Yo también compré, me dio un poco de envidia… Un besazo enorme y felicidades por este post tan chulo!!
Gracias a ti de nuevo por ocuparte de todo.
Que sepas que lo del embutido te tomo la palabra y luego te lo reclamaré!!! 😉
Un besazo
Fue un día fantástico!!! Me encantó poder veros a todos de nuevo. Y sobre todo me encantó verte tan bien a pesar de estar ya apuntito… Ojalá nos veamos otra vez muy pronto y con tu peque. Por cierto, a la próxima me tiro contigo por la tirolina. Que yo también me quedé con ganas!!! Jejejeje
Un besote. 🙂
Lo de la tirolina por supuesto!! Y como dices a ver si nos vemos pronto de nuevo ya sin tripilla.
Un abrazo
Bueno, que post mas completo! Me encanta, no te has dejado nada! Sin duda toda una alegría volver a coincidir con vosotros en un blogtrip y compartir un día tan estupendo, sobre todo esa «xarraeta» después de comer, verdad? Admirable como aguantaste estando embarazada de 35 semanas, pero como ni se te nota, jajaja…
Un besazo y nos vemos pronto!
Ay mi querida Elisa!!
Qué bien lo pasamos y cuanto «cascamos» a costa de los santos de nuestros respectivos que se encargan de las criaturitas al menos un rato.
A ver si nos vemos pronto de nuevo.
Un besazo!
Como sentí no poder llegar… Tengo ganas de veros. Mimate mucho y a esa barriguita también
Ya lo sé Ana. A mí también me supo fatal.
En eso estamos cuidando la tripilla.
Un abrazo!!!