Que los DIY me encantan ya lo sabéis , pero si encima con uno de ellos ganas las miradas de todos cuantos te rodean y se acercan para preguntarte por tu nuevo «juguetito» la satisfacción ya es máxima.
Esto me ha ocurrido la pasada noche de San Juan. Decidí estrenar mi último proyecto en plena playa. Lo confieso, quería ser la comidilla de la gente de la urbanización y demás que se unieran a celebrar la llegada del solsticio de verano.
Pero no tanto. Cuando grupos de adolescentes te rondan e incluso sacan el móvil para hacer fotos ya no mola tanto. Los imaginaba pensando: «¿Qué hará la vieja esa con esa silla de discoteca?» y cosas similares.
Al menos sí que hubo quien se me acercó a preguntarme si tenían luces led ^^ y también que cómo lo había hecho. Les expliqué por encima el modo pero les dije que visitaran mi blog, aunque no sé si muchos de ellos lo recordarán hoy. ¡¡Una tiene que hacerse publicidad!! o al menos intentarlo.
En fin, toda esta historia empezó cuando Belén, de Pintar sin parar me pasó un listado con sus productos especiales. Quien piense que tienen la típica tienda de pinturas de pared de toda la vida no puede estar más equivocado. Tienen pintura para todo. Y cuando digo todo es TODO así con mayúsculas.
Ahí que me metí de pleno a ojear esas páginas alucinando con la variedad cuando de repente lo leí: Pintura luminiscente.
«No puede ser» pensé para mis adentros. «Yo tengo que hacer algo con esta pintura».
Así que decidí que una buena manera de usar la pintura luminiscente era en las sillas de plástico del chalet. Por el día se recargarían a pleno sol y por la noche además de ser la sensación, darían un ambientazo tremendo.
Para el experimento elegí un juego verde de sillas bastante descolorido por el sol constante. ¿Por qué no darle otra oportunidad a estas pobres sillas que ya parece que nadie quería por el aspecto viejo que tienen?.
Decidí que el spray iba a ser más cómodo y rápido de aplicar y luego tuve que escoger qué duración de emisión de luz quería para mi pintura: normal (4 horas), media (6) o alta (10).
Con la pintura ya en mi poder y una vez protegido el espacio donde iba a utilizar los sprays me puse manos a la obra:
- Limpié con un paño húmedo todas las sillas.
- Me protegí con mascarilla y con una bata y guantes.
- Las rocié con spray.
Sí. Así de sencillo. Bueno, o no tanto.
La principal complicación de esta pintura es que es transparente, por tanto no ves como va quedando hasta que no la expones al sol para cargarla y luego la llevas a un lugar oscuro para que «brille». Como sabía que sería muy difícil obtener un resultado uniforme decidí rociar a franjas la primera de las sillas. Así yendo y viniendo con el spray e imaginándome cómo quedaría una vez terminada.
Tras dejarla 5 minutos secar la saqué para que le diera la luz del sol. 10 minutos aguanté, impaciente que es una, hasta volverla a meter cerrando todas las persianas para observar el efecto y… ¡¡¡wooooooow!!!.
«¡¡Me encaaaaanta!!» grité. Sí, lo confieso, grité a solas dando saltitos como una niña pequeña.
Nada más ver el resultado mi cabecita empezó a maquinar otras maneras de decorar la otra silla. Y decidí que una buena idea sería utilizar los reposabrazos y la parte superior del respaldo como un arco decorativo en el que plasmar unas estrellas fluorescentes.
Como os digo ayer en la playa fueron el centro de atención, pero por desgracia las fotos no le han hecho demasiada justicia. Os muestro la que creo que se ve mejor y aún así se queda corto.
Para que podáis apreciar de verdad el efecto aquí os traigo un montaje que he hecho con una de las sillas a plena luz del día en el centro y las otras dos con la luz apagada a los lados. ¿Qué os parece? No me digáis que no son muy molonas.
Definitivamente confieso que me he hecho adicta de la pintura luminiscente y no creo que la cosa quede aquí. Alguna silla más añadiré a este par y algún que otro proyecto que ya estoy imaginando. ¡¡Me entra emoción sólo de pensarlo!!.
2 Comentarios
[…] Lo primero que se me ocurrió fue meter una guirnalda de luces led como las de Navidad, pero luego pensé que sería mejor optar por otro método que no precisara pilas… y entonces me acordé de la pintura luminiscente de Pintar sin parar que utilicé para hacer mis sillas reflectantes. […]
Hola!, me encantan tus post de decoración tan original, me gustaría ofrecerte algún felpudo originak de mi tienda online, ¿cómo podemos ponernos en contacto contigo? Gracias!