¡¡Horror!!. ¡¡Sí, horror!!. Eso pensé cuando maridín me llamó desde el dormitorio. Le estaba cambiando el pañal a Bolita y quería que viera una cosa. Yo fui pensando que sería una irritación o incluso un pedazo grande de comida entre sus caquitas (o cacotas), de esos con los que a veces te sorprenden los más peques. Pero no… Entré y me lo encontré señalando una zona de su nalga. Al acercarme lo vi. ¡¡Una minilombriz enana, blanca, asquerosa retorciéndose en un baile infinito!! Puaaaajjjjj. Maridín lo acompañó con un: «¿No decías que no sabías como eran las lombrices?, pues ahora ya lo sabes!». Menuda gracia me hizo.
Acto seguido como buena friky mami preocupada comencé a navegar por internet a la búsqueda de remedios naturales para tratarlos, evitarlos… ¡¡erradicarlos!!. Pero finalmente llegué a la conclusión que mejor sería una visita a la pediatra.
Al día siguiente salí de la consulta receta en mano, un kit «especial» en una bolsa y con una serie de recomendaciones de aúpa. Cambio de sábanas, toallas y pijamas incluidos con su correspondiente lavado con agua caliente.
Suerte que mi peque aún lleva pañal, body y además duerme con un pijama de esos cerraditos. Las lombrices al menos lo tienen más difícil para campar a sus anchas. Aún así me recomendó la doctora tratar a toda la familia por si acaso (a mis padres y a mi hermana los incluí en el paquete porque cuando vamos a su casa le encanta subirse en sus camas a intentar convencerlos para que le pongan Peppa Pig).
La medicación para adultos consistía en una sola toma de una pastilla. Lo de la peque sin embargo lleva su tela. Estas fueron las directrices de su pediatra:
- Jarabe durante tres días seguidos.
- A los 10 días recogida de heces de 3 días distintos.
- A los 10 días también test de Graham durante 3 días seguidos. Que consiste básicamente en pegar un celo en el ano de tu bebé para posteriormente despegarlo y volverlo a pegar en una placa de vidrio de esas de laboratorio. Moooola ¿eh?. (Modo irónico off).
- Repetir la toma del jarabe a los quince días.
Lo del celo pues mira, no es complicado ni asqueroso (al menos para mí), pero lo de las heces…
Aquí os ilustro con una foto parte del material de recogida de cacas.
Quedáos con los dibujitos que ilustran cómo se recoge la muestra. A ver señor o señora que inventó la cucharilla recogecacas ¿cómo voy a recoger con ella heces (además del centro, que lo dicen bien claro) sin que queden restos en el exterior o forme montañita? Que alguien me lo explique de verdad.
Aunque bueno, teniendo en cuenta que en el panfleto que os muestro arriba lo llaman «mustra» igual es que no he pillado algo bien.
Total que al final me las ideé para dar con un sistema que se ajustase a sus peticiones. Y no. No lo pienso relatar aquí a menos que haya una petición popular.
Por suerte ambas pruebas dieron negativo en oxiuros (bueno y en todo), que es el nombre técnico de los dichosos parásitos intestinales. ¡¡Menos mal!!
Y ahora en serio os pregunto ¿alguna vez habéis tenido que hacer algo similar? Si la respuesta es afirmativa os agradecería que compartiérais la experiencia en los comentarios por si podemos ayudar a alguien o si me toca repetir la operación (crucemos los dedos para que no sea así).
11 Comentarios
Vaya tela tía… Pobrecita la peque, como esta?, espero que ta recuperada 🙂
Ay madreeeeee!! El día que me tenga que ver en esa tesitura, con lo asquerosita que soy..
Tengo que decirte que me he reído mucho en algunas cosas..
Voy a compartir, a ver si alguna mami te puede ayudar ¡ánimo!
Besos
Hola Núria,
La peque está como una rosa, muchas gracias 😉
Si alguna vez te toca hacer «arreplegá» siempre puedes intentar encalomárselo al señor esposo (si es que se deja jejeje).
Me alegro de que te hayas reído. Así en clave de humor se hace todo más llevadero.
Gracias por compartir.
Un besazo.
Mi hija mayor tuvo un problema de diarrea crónica inespecífica desde los 6 meses hasta cerca de los 3 años que su intestino maduró y dejo de hacer mas de 10 cacas diarias… para llegar aese diagnóstico tuvimos que hacerle muchas pruebas para ir descartando todas las enfermedades q pueden causar una diarrea crónica y si, tuvimos que recoger muuuuchas muestras de muchas maneras…te llegas a acostumbrar y parece que hasta las cacas ya dejan de ser cacas, jajaja… pero en fin, ella ahora esta bien y hace vida normal pero menudos añitos pasamos!
Espero que tu peque se mejore pronto, haced caso a los medicos y mucho animo que pronto pasará!
Hola Elisa,
Pobreta!!! Tu sí que debiste hacer recogidas…
Pues ya me explicarás cómo lo hacías para no manchar el exterior de la cuchara.
Y gracias por tus ánimos!! Por suerte mi peque está estupendamente.
Un abrazo.
Pues no, y visto lo visto espero no tener que hacerlo!!! 😛
Pues te deseo eso mismo, que nunca tengas que enfrentarte con algo así 😉
Pobrecilla!!! Espero que ya esté mejor tu peque. Pues la verdad de caca no he tenido que recoger muestras, pero espero que no tenga que hacerlo nunca, porque veo que tiene su ciencia y su parafernalia. De orina sí que tenido que recoger varias veces pero es algo más sencillo.
Lo de orina cuando son muy peques también es un rollo porque hay que pegarles una especie de bolsa ahí. Me lo contó una amiga.
Lo de la caca no tiene nombre, sobre todo con lo «bien» que huelen.
Como ya te he dicho por face mi peque está estupendamente, muchas gracias Marta.
Un abrazo.
Yo de caca aún no ni personal ni laboralmente pero la que le hicieron de orina a la nena hace un par de meses fue toda una odisea, finalmente pudieron aprovechar las 4 gotas que quedaron dentro de la bolsa
Buena información! Gracias por compartir 🙂
Pobrecilla! A la mía le ha pasado algo similar 🙁